INFORMACIÓN GENERAL  

Duración del Curso: 10 semanas. 
Ejes Temáticos: Mujer, participación ciudadana, equidad de género y emprendimiento 
Modalidad: Virtual y trabajo extracurricular.   

JUSTIFICACIÓN
 
 

Históricamente las mujeres han luchado con el objetivo de fortalecer su rol como líderes sociales con derechos políticos, alcanzando importantes avances normativos a nivel mundial que han logrado cambiar las estructuras culturales que mantiene modelos de desigualdad de género en los países. 

Es por esto que la principal herramienta para luchar contra la desigualdad es la educación, logrando fortalecer la visión crítica de las mujeres frente a los factores que afectan su desarrollo político y económico, a partir de un modelo que rompa los estereotipos de una sociedad machista y que permita la participación efectiva de las mujeres en escenarios de toma de decisiones. 

A pesar de que la brecha entre hombres y mujeres en salud, educación, oportunidades económicas y representación política se ha cerrado un 4,1 % en los últimos 10 años, en la región Andina la brecha de género sigue siendo muy amplia: Bolivia 74.6%, Chile 78.1%, Colombia 74.6%, Ecuador 78.8% y Perú 75.5%. En 2024, la brecha global de género se ha cerrado en un 68,5%. Al ritmo actual de progreso, se necesitarán 134 años para alcanzar la paridad total, según el Informe Global de la Brecha de Género 2024. 

Así, el desarrollo de las capacidades y aptitudes de las mujeres fomentará su participación en diferentes áreas laborales, brindándoles herramientas para romper con los obstáculos estructurales que han propiciado su dependencia a labores ligadas con el hogar y que han reducido su participación en los ámbitos profesional y político.  

Por lo tanto, las acciones estratégicas emprendidas por instituciones y organismos internacionales deben estar enfocadas en la construcción de una sociedad que brinde oportunidades sin discriminación alguna, tales como el aprendizaje, el cual no sólo permite desarrollar capacidades sino también impulsar avances sociales en la comunidad.  

El incremento de la participación de mujeres líderes a nivel político y económico contribuirá a fortalecer las economías de los países y las familias. Por esto es importante la construcción de redes de educación que brinden programas con enfoque de género y amplíen el acceso a programas educativos diseñados con el fin de satisfacer las necesidades laborales a las que se enfrentan las mujeres en el siglo XXI. 

De esta forma, el Parlamento Andino interesado en fortalecer las políticas de participación de la mujer, considera que la educación debe estar proyectada desde un objetivo de inclusión, donde los esquemas clásicos de educación sean reformados, permitiendo que las mujeres con diferentes cargas laborales y familiares puedan acceder a programas de capacitación virtuales.